Moscas en el desposte: riesgo sanitario en auditorías senasa

La presencia de moscas en las áreas de desposte durante una auditoría SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria) es un problema grave que puede poner en riesgo la seguridad alimentaria y la salud pública. Las moscas son vectores de enfermedades, contaminan los alimentos y pueden causar pérdidas económicas significativas. En este artículo, profundizaremos en la problemática de las moscas en la zona de desposte, analizaremos las causas de su presencia y exploraremos las medidas preventivas y de control que deben implementarse para evitar su proliferación durante las auditorías SENASA.

Las Moscas: Un Peligro Oculto en la Zona de Desposte

Las moscas, especialmente las moscas de la fruta, son un problema recurrente en las áreas de desposte, donde se procesan y manipulan productos cárnicos. Estas pequeñas criaturas representan un riesgo sanitario considerable debido a su capacidad de transportar patógenos y contaminar los alimentos. Las moscas se sienten atraídas por la materia orgánica en descomposición, como la carne, y pueden depositar huevos en ella, lo que puede generar larvas que contaminan el producto y lo hacen inadecuado para el consumo.

Cómo las Moscas Contaminan los Alimentos

Las moscas, al alimentarse de materia orgánica en descomposición, recogen bacterias, virus y parásitos que se adhieren a sus patas, alas y cuerpo. Estas bacterias pueden ser transmitidas a los alimentos cuando la mosca se posa sobre ellos. Además, las moscas pueden regurgitar enzimas digestivas sobre la superficie de los alimentos para disolverlos y facilitar su consumo. Estas enzimas también pueden contener bacterias y otros patógenos que contaminan el alimento.

Auditorías SENASA y el Control de Plagas

Las auditorías SENASA tienen como objetivo evaluar las condiciones sanitarias de los establecimientos de producción y procesamiento de alimentos, incluyendo las áreas de desposte. Durante estas auditorías, se inspecciona la presencia de plagas, como las moscas, y se evalúan las medidas de control que se implementan para evitar su proliferación. La presencia de moscas durante una auditoría SENASA puede resultar en observaciones negativas, sanciones e incluso el cierre del establecimiento.

Factores que Contribuyen a la Presencia de Moscas en la Zona de Desposte

La presencia de moscas en la zona de desposte puede estar relacionada con varios factores, entre ellos:

• Falta de higiene: La acumulación de residuos orgánicos, como restos de carne, sangre y grasa, en el área de desposte atrae a las moscas.
• Malas prácticas de limpieza: Una limpieza deficiente de las instalaciones, los equipos y los utensilios crea un ambiente propicio para la proliferación de moscas.
• Falta de control de acceso: La falta de medidas para evitar que las moscas ingresen al área de desposte, como mosquiteros en las ventanas y puertas, facilita su acceso a la zona.
• Falta de control de plagas: La ausencia de un programa de control de plagas efectivo, que incluya el uso de trampas, insecticidas y otras medidas, permite que las moscas se reproduzcan y proliferen.
• Entorno exterior: La presencia de basureros sin tapa, áreas con vegetación descuidada y fuentes de agua estancada en las inmediaciones del establecimiento pueden ser focos de atracción para las moscas.

Medidas Preventivas y de Control para las Moscas en la Zona de Desposte

Para evitar la presencia de moscas en la zona de desposte durante las auditorías SENASA, es fundamental implementar medidas preventivas y de control que reduzcan la atracción y la proliferación de estas plagas. Estas medidas incluyen:

Higiene y Limpieza

• Limpieza regular: Limpiar a fondo el área de desposte, incluyendo pisos, paredes, mesas, equipos y utensilios, al menos una vez al día, eliminando cualquier residuo orgánico.
• Desinfección: Desinfectar las superficies del área de desposte con productos químicos autorizados para eliminar bacterias y otros patógenos.
• Manejo de residuos: Disponer de contenedores con tapa para los residuos orgánicos, vaciarlos con frecuencia y mantenerlos limpios.
• Control de insectos: Utilizar insecticidas autorizados para el control de moscas, siguiendo las instrucciones del fabricante.

Control de Acceso

• Mosquiteros: Instalar mosquiteros en las ventanas y puertas del área de desposte para evitar el ingreso de moscas.
• Sellado de grietas: Sellar cualquier grieta o abertura en las paredes y techos del área de desposte para evitar que las moscas ingresen.
• Ventilación: Asegurar una buena ventilación en el área de desposte para evitar la acumulación de humedad que atrae a las moscas.

Control de Plagas

• Trampeo: Utilizar trampas para moscas, como trampas adhesivas o trampas con atrayentes, para capturar las moscas adultas.
• Control biológico: Considerar la posibilidad de utilizar enemigos naturales de las moscas, como avispas parasitoides, para controlar su población.
• Monitoreo: Realizar un monitoreo regular para detectar la presencia de moscas y evaluar la efectividad de las medidas de control.

Entorno Exterior

• Control de residuos: Asegurar que los basureros en las inmediaciones del establecimiento estén cubiertos con tapas y vaciados con frecuencia.
• Mantenimiento de áreas verdes: Mantener las áreas verdes alrededor del establecimiento limpias y libres de vegetación descuidada.
• Control de agua estancada: Eliminar cualquier fuente de agua estancada en las inmediaciones del establecimiento, como charcos o recipientes sin tapa.

La Importancia de la Prevención y el Control de Plagas

La prevención y el control de plagas, como las moscas, en la zona de desposte son fundamentales para garantizar la seguridad alimentaria y la salud pública. La presencia de moscas en las áreas de procesamiento de alimentos representa un riesgo sanitario importante, ya que pueden contaminar los productos y transmitir enfermedades. Es responsabilidad de los establecimientos de producción y procesamiento de alimentos implementar medidas preventivas y de control efectivas para evitar la proliferación de plagas y garantizar la calidad e inocuidad de sus productos.

Consultas Habituales

¿Qué medidas preventivas se utilizan para evitar la plaga de las moscas de la fruta?

Las medidas preventivas para evitar la plaga de las moscas de la fruta incluyen la limpieza regular del área de desposte, la eliminación de residuos orgánicos, el control de acceso de las moscas, la utilización de trampas y la aplicación de insecticidas autorizados.

¿Cómo hace la mosca para contaminar los alimentos?

Las moscas contaminan los alimentos al depositar huevos en ellos, regurgitar enzimas digestivas sobre la superficie de los alimentos y transportar bacterias y otros patógenos en sus patas, alas y cuerpo.

¿Quién controla la mosca de la fruta?

La mosca de la fruta es controlada por el SENASA (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria), que realiza auditorías en los establecimientos de producción y procesamiento de alimentos para evaluar las condiciones sanitarias y la presencia de plagas.

¿Qué tipo de trampas se utilizan para capturar moscas?

Existen varios tipos de trampas para capturar moscas, como trampas adhesivas, trampas con atrayentes alimenticios y trampas de luz. La elección de la trampa dependerá del tipo de mosca y del ambiente en el que se va a utilizar.

¿Qué insecticidas se utilizan para el control de moscas?

Los insecticidas utilizados para el control de moscas deben ser autorizados por el SENASA y deben aplicarse siguiendo las instrucciones del fabricante. Algunos de los insecticidas más utilizados para el control de moscas incluyen el Malatión y el GF-120.

La presencia de moscas en la zona de desposte durante una auditoría SENASA es un problema grave que puede poner en riesgo la seguridad alimentaria y la salud pública. Para evitar este problema, es fundamental implementar medidas preventivas y de control que reduzcan la atracción y la proliferación de las moscas. Estas medidas incluyen la limpieza regular, la eliminación de residuos orgánicos, el control de acceso, la utilización de trampas y la aplicación de insecticidas autorizados. La responsabilidad de garantizar la calidad e inocuidad de los productos alimenticios recae en los establecimientos de producción y procesamiento de alimentos, quienes deben implementar medidas efectivas para evitar la proliferación de plagas y garantizar la seguridad de los consumidores.